¿Cómo colocar las copas en una mesa?

En primer lugar, para que sepas cuál es la correcta colocación de las copas en una mesa, debes tener conocimiento de qué bebidas vas a servir a lo largo de la comida. Por lo general, las reglas de etiqueta indican que se debe colocar una copa de agua en el lado izquierdo y, a la derecha, una copa de vino.

Así pues, para que haya una adecuada colocación de las copas en la mesa debes posicionarlas en la parte superior frente al plato, esta es la manera en que se suelen colocar las copas, generalmente, para el uso diario. A continuación te explicaremos otras maneras de llevar a cabo la colocación de las copas en la mesa dependiendo de la bebida que solicita el cliente.

Colocación de las copas en la mesa: copa de agua, copa de vino y copa de champán

Dependiendo del evento, habrá una mayor o menor cantidad de cristalería en la mesa. Para eventos especiales es importante que coloques las copas más habituales sin recargar la cantidad en la mesa. Por lo tanto, normalmente se colocan las siguientes:

-Una copa de vino tinto.

-Una copa de agua.

-Una copa de vino blanco.

-Una copa de champán.

Con esta cantidad de copas tienes las necesarias para que la mesa sea elegante pero sin estar demasiado recargada. Si deseas añadir alguna otra, puedes hacerlo, pero no es lo más recomendable porque estarías colocando muchos elementos en la mesa y abrumarás a los comensales.

Algo fundamental es que, si vas a servir distintos tipos de vino, cambies las copas, ya que es mucho más elegante al cambiar de vino tinto a blanco, rosado o espumoso, hacerlo por medio de una sustitución de copa.

Entonces, ¿en qué orden colocamos las copas en la mesa?

Ahora que ya sabes qué tipo de copas puedes colocar en la mesa: copa de agua, copa de vino tinto, copa de vino blanco y copa de espumoso, te presentamos el orden adecuado de las mismas. Lo primero de todo, la cristalería que uses para servir las bebidas debe ser transparente, sin dibujos, letras y ningún tipo de tallaje.

En cuanto al orden, de izquierda a derecha, se debe colocar la copa de agua, luego la de vino tinto y la copa de vino blanco. Por último, la copa de champán, que se debe colocar en segunda fila, justo detrás de la copa de agua y la de vino tinto.

Si vas a servir una copa de jerez, la misma debe ser colocada a la derecha de la copa de vino blanco. La copa de licor, por su parte, no debes colocarla hasta que no llegue el momento de servir el postre o el café. Debes recordar que no es recomendable colocar más de cinco copas en la mesa para que no se aprecie mucha sobrecarga e ir retirando las que no se vayan a utilizar más.

Otro orden en el que es admitido la colocación de copas en mesa

Además del orden clásico en el que puedes colocar las copas en la mesa, también se admiten los siguientes:

En cuadrado (cuando son cuatro copas)

Para ordenar las copas de esta manera debes colocar el primer vino en el extremo inferior derecho del cuadrado, el segundo en la parte superior y, luego, se colocan las demás en el sentido inverso de las agujas del reloj.

En triángulo (cuando se trata de tres copas)

La copa que se encuentra a la derecha de la mesa se usa primero y, en cuanto al resto, deben ser colocadas en sentido inverso a las agujas del reloj.

En línea (cuando son cinco copas)

Para este orden, debes seguir el mismo que cuando se sirven las copas de vino, es decir, de afuera hacia adentro. Por lo tanto, la primera copa debe ser posicionada más a la derecha y la última debe ser la copa de agua que, por ende, queda en el extremo opuesto de la mesa. La fila de copas pueden ser colocadas, tanto en diagonal a los cubiertos como paralelas al plato.

Es muy importante tener en cuenta la elegancia, uniformidad y el estilo de las copas en el momento de colocarlas en la mesa

En el momento de elegir las copas que van a ser colocadas en la mesa, es importante que sean de la misma cristalería. Esto quiere decir que todas tienen que poseer la misma talla, forma, diseño y color (en caso de que se aplique). Por otro lado, es mucho más elegante elegir cristalería transparente para que el aspecto general de la mesa sea mucho más clásico.

De este modo, lo más aconsejable es que el cristal de las copas sea bastante fino. Si quieres asegurarte de que dicho cristal sea de buena calidad, solo debes pasar la yema humedecida de tu dedo por el borde de la copa.

Por otro lado, las copas de buena calidad están fabricadas como una única pieza. Si son dos piezas separadas y pegadas, se trata de una cristalería de baja calidad.

En cuanto al diseño de las copas, estas deberían ser de buen tamaño, con boca ancha para evitar que se escapen los aromas.

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